viernes, 6 de julio de 2012

Cuando se cumple un Ciclo.

A quien corresponda:
No se muy bien como empezar o como escribirlo. Tampoco se si quiero hablar de un tema en particular o de varios a la vez. Mucho menos si va dirigido a muchos o a unos pocos. Tal vez solo a dos. Ellos lo entenderán, pero el resto también.
Un ciclo se cumple cuando se llega al final de algo. Cuando algo termina. Así como para mi termino este ciclo de Boca. Seguramente Riquelme crea que también se termino el suyo. Pero no son los únicos. Siento que el mío también llego a un final. En estos últimos 6 años y utilizando palabras de uno de mis hermanos, pasaron muchas cosas y vivimos muchas cosas junto a Boca que serán irrepetibles. No siempre tendremos esta edad y la posibilidad de y por así decirlo no ser tan responsables y poder estar en todos lados siguiendo a un club de fútbol. A nuestro club. Hicimos de un sentimiento una pasión. Lo vivimos intensamente. Por momentos fue desgastante hasta el extremo, incluso llevó a enojos, peleas y alguna cara larga porque no, pero nunca lo dejamos de disfrutar. Viajamos mucho, sacrificamos muchas cosas y conocimos muchos lugares. Arrancamos de a poco y terminamos a lo grande. No fue nada fácil. Sobre todo en este último tiempo donde por un lado el cansancio del desgaste agotaba y por el otro los viajes al exterior para seguir esta campaña de la Copa Libertadores requerían mucha organización, esfuerzo económico y sobre todo dejar de lado muchas cosas como trabajo,  y otras responsabilidades. Se nos han pasado por la cabeza infinidad de cosas, se nos han ocurrido ideas loquísimas y se han barajado opciones de todo tipo. Hemos estado arriba de un viaje y abajo a los dos minutos y viceversa.
Han pasado muchas cosas en este tiempo. Allá lejos quedan los viajes a Rosario que parecían una epopeya. Mucho mas acá en el tiempo fueron Mendoza y Córdoba y finalmente, Río de Janeiro, Santiago de Chile y San Pablo. Ninguno deja de ser espectacular, pero estos últimos fueron muy estresantes, sobre todo el último que no se la pasó tan bien. Pero ¿Cuándo se la pasa bien en esto? Nadie nos quitara lo Bailado. Infinidad de anécdotas e historias para contar y repetir una y otra vez a través de generaciones. Y no porque sean historias dignas de contar, que tengan algo increíble o algún mensaje de enseñanza para alguien; pero tal vez alguien que comparta estos sentimientos las disfrutara tanto como los que las vivimos.
Hoy casi 6 años después de haberme hecho socio de Boca y tener la posibilidad de ir a todos lados y ver y vivir todo lo que mi viejo vivió a mi edad pero que no me pudo mostrar  por el simple hecho de que de chico se hace difícil que te lleven de visitante y de grande se hace difícil llevarlo a él que es mas grande, puedo decir que cumplí un ciclo. No tendré toda la vida 23 años para poder estar en todas partes aunque quisiera. Pero también se que ese recuerdo no me lo voy a olvidar jamás. Lo que compartí con mis hermanos es algo que quedara en mi memoria y seguramente en la de ellos. Estoy feliz de que haya sido con ellos, de lo contrario se que no hubiera sido nunca. Siempre estaré agradecido. Se que esto no termina acá y algún día con otras comodidades y facilidades estaremos de vuelta viendo alguna final de copa de visitante. Lo que se, es que por el momento los viajes se terminaron. Deje todo y dejamos todo. Festejamos y nos entristecimos. No pude haber dado más y no pudo ser mejor. No es una despedida sino un simple adiós.
Gracias Boca.
Gracias Viejo.
Gracias Hermanos.
Gracias a ustedes.   

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